Despedidas.

Despedirse es parte de la vida, dejar ir es una parte importante del recorrido en que andamos, pero actualmente en Venezuela despedir está entre las actividades más comunes, y cuidado sino la única. Porque como personas hablamos de que estamos preparados para decir adiós siempre y cuando sepamos las condiciones, estemos de acuerdo y tengamos tiempo para acostumbrarnos. Pero al ser impuesta es diferente, al ser obligada no hay condiciones ni tiempo suficiente para nada, al ser impuesta no se controla, y al no controlarse sin duda causan un gran impacto en nosotros. 

Ver o experimentar las cosas a través de un tercero, en televisión o leer las muchas historias que existen sobre las despedidas no se asemejan a vivirla en primer plano, y solo cuando la vives es que te das cuenta de eso.

Que el dejar ir solo sea el mayor motivó para volver, que quienes hoy son uno menos en la rutina diaria sea uno más de motivación para seguir por algo mejor, quien hoy falte en la foto familiar este en los corazones y mente de cada uno, quien hoy no duerme bajo tu techo duerma bien en el otro país, que las miles de familias separadas se puedan volver a unir, porque aunque despedirse es duro encontrarse es mucho mejor, que se encuentren siempre y constantemente, hasta que un día no tengan que despedirse ni encontrarse más, hasta que un día vuelvan a ser parte de uno solo. 

Despedirse es parte de la vida, y eso está bien, con condiciones o no, acostumbrados o no, siempre habrá amor y dolor y eso es parte del recorrido.